Por Reynaldo Morales

No todo es color de rosa en el tablero político mundial. Pero definitivamente las piezas
grandes se acomodan con ventaja en los últimos meses para el Sur Global. Ya pagan
dividendos y neutralizan las amenazas del norte global. El conflicto de Ucrania ha
puesto en ventaja a Rusia y ya nadie niega, en el engañado occidente, esa verdad
excepto el señor Zelensky y su manager Andriy Yermak (jefe de gabinete).
China responde con tarifas y suspensión de exportaciones e importaciones de
productos y materiales críticos de producción. El presidente Trump tuerce la voluntad
del presidente de Ucrania y este se resiste con el apoyo de Gran Bretaña y los
principales países europeos porque no hay consenso en la Unión Europea.
Las últimas noticias sobre el conflicto en Ucrania refleja la voluntad de Estados Unidos
de poner fin al derroche de dinero que consume todo conflicto bélico generando un
aumento increíble en la deuda pública de niveles impagables. La amenaza al dólar
y a la economía estadounidense. Claro, tratan de resolver eliminando gastos excesivos
que por primera vez incluyen a las agencias que encubren las injerencias de
Washington en todo el orbe para manipular opinión y subvencionar cambios de
gobiernos que se resisten a sus políticas de dominio.
Por su parte los europeos quisieran sabotear el posible acuerdo adoptando posturas de
todo o nada con la oferta de cese al fuego. De paso, esa es la moneda dispuesta a dar
Zelenski en las discusiones de paz. Rusia no aceptara esa propuesta y les sugeriría
que lo aderezan con garantías sustantivas si desean llegar a un acuerdo de cese de
hostilidades. Pero mientras tanto, la NATO vuelve a proponer sanciones, suministrar
más armas y asistencia satelital. Resulta ser un absurdo total que los europeos ahora
vean en el militarismo la mejor manera de volver a revitalizar sus economías sin
realizar que eso conlleva el mantener una política antirrusa y anti-China. En el pecado
está la penitencia.
Conviene recordar que de donde se nutren las mejores industrias armamentistas es de
los recursos que provienen de China y Rusia. Por ejemplo, el antimonio es un elemento
indispensable en la fabricación de explosivos potentes y eso quien lo produce
considerablemente es China y ya ha dicho que dejará de exportar a quienes profesan
animosidad en su contra.
Aun así, buena parte de ese ahorro se hace quitándole a los menos que reciben para
evitar quitárselo a los grandes intereses. Por eso, un señor billonario de apellido Musk
ha decidido poner sus conocimientos de gerencia para eliminar esos gastos superfluos,
que sin duda los hay, en esa maquinaria de generar todo tipo de contratos a sus
amigos del alma. De ahí se aprovechan para recortar plazas a través de todo el gobierno federal afectando mayormente a quienes menos tienen culpa del despilfarro y
proveen importantes servicios como a los veteranos y atacan al Seguro Social
afectando a los millones de beneficiarios.
Todo muy antipático y pretenden congraciarse ofreciendo devolver parte de esos
ahorros. Es tan fuerte el golpe a sus propios seguidores que Elon Musk ha empezado a
difundir videos cortos sobre cuán hábiles y determinados son los chinos para lograr
importantes desarrollos en todos los campos de la economía y la tecnología
destacando cuán productivos e innovadores son.
Olvidan que China es un país que propicia el crecimiento industrial y la prosperidad en
común contrario a los Estados Unidos que fomenta el rentismo financiero haciendo del
endeudamiento privado y público su fuente de enormes ingresos para el uno por ciento
y disminuyendo los ingresos y el poder adquisitivo del restante 99 por ciento. Es una
fórmula que no puede permitir que ocurra crecimiento industrial porque destruyó su
competitividad. En vano intenta el presidente Trump forzar el establecimiento de
industria para revitalizar la economía con producción real. Su salida de esa situación no
será tratando de chantajear y sobornar al resto del mundo primero porque no resuelve
el problema a lo interior y segundo porque ya no son la única alternativa de intercambio
comercial. Si quieren salir tienen que destruir el poder de su sector financiero y someter
a todos esos monopolios y carteles importantes empezando por los cibernéticos.
Necesitan una revolución.
En Europa se dan a la tarea de tratar de contrarrestar las políticas Trump con los
británicos a la cabeza. En el proceso se agudizan las diferencias de los caminos a
seguir y la líder de esa comunidad para adelantar el desarrollo económico de la
comunidad europea ahora le disputa a la NATO el puesto de guerrerista número uno.
Se pudiera decir que ya hay duplicidad de funciones. Mientras las economías de estos
países experimentan las bajas que deberían estar sufriendo Rusia y China. Grandes
empresas, por ejemplo, como la Volkswagen y Stellantis (Fiat, Abarth, Alfa Romeo,
Maserati, Peugeot, Citroen, Opel, Lancia, etc) experimentan bajas dramáticas en sus
ventas. El mercado de vehículos eléctricos chinos ha transformado el mercado del
transporte a una velocidad increíble. Hay tres factores que ya hacen a los vehículos de
combustión interna cosa del pasado. El primero es la revolución en la fabricación y
reducción de precios en las baterías de litio de larga duración. Segundo la cantidad de
rendimiento en kilómetros por carga duplica la de combustible y hasta triplica con
facilidad ese rendimiento con reducción considerable del tiempo de recarga. Tercero,
elimina al mayor contaminante del ambiente de las grandes ciudades con aire más
limpio y disminución sustancial del ruido. Las baterías de litio están todos los día
rompiendo récords de eficiencia con garantías de 150,000 millas en el estado de
california. Hoy cuesta menos reemplazar una batería que un motor según Sam Evans del canal The Electric Viking en YouTube. También se pueden reprocesar y sirven muy
bien para almacenar energía solar.
China acaba de superar a STAR link en velocidad de comunicación logrando que el
láser de sus satélites se extienda al transmisor/receptor terrestre lo que lo hace 10
veces más rápido. El mismo Elon Musk utiliza en sus videos la capacidad de los chinos
para innovar y perseverar ante la adversidad. Es evidente, hasta para el famoso
inversionista Ray Dalio, la debacle económica que se avecina para Estados Unidos.
Los eventos se están desarrollando a una velocidad vertiginosa, tanto en el campo
bélico, pero también en el económico como en el tecnológico y eso requiere que se
mantenga un ojo crítico en las actuaciones políticas dentro y fuera de los países
actores. Será la consistencia en el manejo de los hechos lo que le dará coherencia y
éxito a quienes participan. Los países pequeños, como actores de reparto, se
beneficiarán del análisis que mejor puedan hacer de los acontecimientos para predecir
cuál será el curso que deben seguir en defensa de sus mejores intereses.
Descubre más desde Movimiento Ñin Negrón
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.









