Por Carlos Rafael Alicea Negrón

Nuestro pueblo enfrenta la violencia económica implementada, por diferentes instituciones coloniales estadounidenses, ilegales, de un invasor, desde el 1898, y el mal llamado “gobierno de Puerto Rico”. 

No importa el disfraz, el régimen en Puerto Rico es y sigue siendo una invasión, la intervención de una nación extranjera, primero utilizando la violencia militar, y luego la violencia social y política.  Se usurpa y niega el ejercicio natural de ser libres de los seres humanos que conforman el pueblo puertorriqueño.

 Estas instituciones han sido embellecidas desde la legalidad imperial.  Los tribunales de la nación que perpetra el crimen de lesa humanidad que es el colonialismo en Puerto Rico, validan el régimen de explotación económica que es la colonia. Son juez y parte. 

También compraron un grupo de incondicionales boricuas, los que Malcom X llamó, esclavos de casa, sirvan de intermediarios implementadores de la explotación económica en la colonia.  La colonia es un negocio redondo para los Estados Unidos. 

Los bombardeos que como ladrón en la noche perpetraron contra población civil; el robo del 40% la riqueza al pueblo al desvalorizar el peso boricua; los proyectos de destrucción económica, mal llamados desarrollos, son violencia.   La meta es despojar, extraer la máxima cantidad de la riqueza que generan los boricuas.  La apropiación y robo de los recursos naturales, en todas sus dimensiones; la apropiación de la productividad de los boricuas en todos los sectores de la economía es violencia, por ello de cada 100 mil millones de dólares al año producido por los boricuas, de entrada, los Estados Unidos se apropia del 30% de esa riqueza; y tienen el cinismo de afirmar que “dependemos de esa nación”.  LA COLONIA ES UN NEGOCIO REDONDO PARA LOS ESTADOS UNIDOS SI NO FUERA ASÍ HACE RATO SE HUBIERAN MARCHADO ESTOS EXTRANJEROS.

Hoy intensifican la violencia económica contra nuestro pueblo.  Esa es la función de la Junta de Control fiscal, implementar la nueva fase del saqueo de la riqueza que producimos. Nos quieren hacer pagar una deuda ilegal, ilegítima y odiosa.  Por eso, cierran escuelas, destruyen corporaciones públicas, niegan la salud y la vivienda a nuestra gente, los quieren empujar al exilio, quieren vender los haberes del pueblo boricua y quieren sacarnos de nuestra nación, sustituirnos y hacernos criados de los extranjeros invasores.

Sectores de nuestro pueblo, resisten y enfrentan esta oleada de lucha, pero es fundamental que la gente se levante y se enfrente, no debemos permitir la continuación de estas acciones que buscan sacarnos de nuestras comunidades y que seamos extranjeros en nuestro archipiélago. Hay que detener la violencia.  Y cuando un pueblo es atacado, diezmado, degradado de la manera en que ocurre hoy en Puerto Rico, tenemos derecho a responder la agresión, a defendernos y defender nuestra vida y la de nuestros hermanos y hermanas.  Y tenemos derecho de utilizar todas las herramientas y vías de lucha que existen y que son validadas por el derecho internacional, cuando se combate las consecuencias de una invasión y ocupación ilegal por una nación extranjera.  Lanzamos un llamado al pueblo de que digamos Basta Ya, y comencemos con tirarnos a la calle el 1ero de mayo frente a las oficinas de la Junta de Control Fiscal.  Si no puedes ir a Hato Rey, entonces organiza una actividad en tu casa, en tu comunidad, en tu barrio, en tu pueblo.  Enarbola en tu hogar, en tu carro una bandera de Puerto Rico y denuncia las medidas que encarecen y nos imponen vivir precariamente en Puerto Rico.

El 1ro de mayo a la calle.  A organizarse y a expulsar la JCF, a reclamar los poderes políticos para poder levantar y construir un pueblo sobre los pilares y objetivos de que todas y todos puedan acceder lo necesario para una vida digna y productiva.