Por Reynaldo Morales

La Charca es una de nuestras novelas más destacadas y su autor, Manuel Zeno Gandía jamás pensó que esa

simbología del agua estancada nos llevaría a tratar la realidad colectiva nuestra con esa misma metáfora un siglo después. Desde luego que “Encharcados” no se define como estar en una charca, pero tomo una licencia poética para implicar eso mismo. Seguimos en la Charca colonial, o sea, en el estancamiento y la podredumbre de aguas muertas donde nuestras vidas se descomponen diariamente. 

Escuchando al gobernador, el licenciado Pedro Pierluisi en un fragmento de la entrevista al periódico El Vocero en el día de hoy lunes 5 de abril de 2021, uno pensaría que aún estamos en el 1894. Ante la pregunta de si estaba “cómodo con seguir y continuar” (“seguir” y “continuar” es lo mismo, son sinónimos) el contrato de LUMA para administrar el servicio de energía eléctrica, este respondió que sí, porque no se podía volver a la administración bajo la Autoridad porque sería volver a lo mismo y eso era el desastre y la ineficacia. Claro, salva las criticas aludiendo a la creación del comité timón que dirige el Srio. Larry Seilhammer, para fiscalizar y sugerir las mejoras que necesite. Yo añado que es un comité de cargar con la culpa de lo malo y no sugerir nada importante como seria devolverlo a manos públicas. De las expresiones del gobernador, cabe señalar, que disolver el contrato no se encuentra entre una de las alternativas, según él, definitivamente.  De hecho, señaló en su comentario final es que eso va “de todas maneras”. No conforme con llamarla Autoridad ineficiente, le echo la culpa por la tardanza en restaurar el servicio eléctrico después del huracán María (desde ahí aprovecharon para otra solución tipo capitalismo de crisis, véase Naomi Klein).

Después de esa contestación no queda más que agradecer que no fuese uno el periodista, porque yo en su lugar, no respondería por lo que hubiese sucedido al escuchar la respuesta. Solo un canalla como Pierluisi se le ocurre hacer un comentario tan irrespetuoso y despectivo sobre el desempeño de la Autoridad sin sentirse responsable, como representante de un partido que ha estado en el poder durante 16 de los últimos 30 años, y él ligado personalmente a 10 o 12 de ellos, como funcionario de esas administraciones coloniales que tuvo a su cargo la agencia. Él se expresa como si la Autoridad fuese algo ajeno a la gestión pública de los partidos que se han repartido el poder. No puedo menos que invitar a que se hagan la siguiente pregunta ¿Cuándo privatizamos la Autoridad nos deshicimos del problema? Parece que no, ¿verdad? Lo cierto es que todas esas privatizaciones no han resuelto ningún problema como tampoco los políticos resuelven la corrupcion o logran que se levante la economía. ¿Si fuese por ineficacia los debimos privatizar a él y a sus amigos hace tiempo, o no?

De esos negocios pendejos el primero fue vender la telefónica. Disque nos íbamos a beneficiar de la competencia y hoy, gracias a los carteles privados telefónicos, pagamos el triple con todo y la internet en pedacitos. No pare ahí, además de la telefónica vea peajes de autopistas, aeropuerto, hospitales, navieras, el puente Moscoso, la banca que era pública, escuelas y se me queda alguno que otro de esos servicios públicos. Están en remojo educación pública, la universidad y acueductos. Todavía pregunto si no habremos vendido lo que no era. A estas alturas Pierluisi debe saber que muchos puertorriqueños piensan que hicimos un mal negocio y cambiamos chinas por botellas. Debiera sospechar que estos cuatro años de su gobernación serán el último pago de una costosa equivocación. A él y a sus compinches populares ya les dimos un adelanto el pasado noviembre.

Por eso ha estado tan lejos de reconocer la labor que la Autoridad de Energía Eléctrica, que a través de sus empleados ha logrado sacar al país adelante en medio de las peores desgracias naturales. Ello a pesar de políticos como él y los anteriores, que han llegado hasta el descaro de ocultar, y hasta robar, la ayuda humanitaria para las emergencias depositadas en almacenes secretos. Así que por más expertos y negociadores que hayan consultado para el contrato, la verdad es que LUMA no ha demostrado ser un mejor administrador y no ha hecho visible cualquier mejoría en el servicio, así como tampoco lograr la reducción de costos al consumidor. Eso fue algo que en las pasadas vistas el Senador Bernabe y la Senadora María De Lourdes Santiago dejaron ver claramente y que los personeros de LUMA tampoco pueden dar idea de cuanto menos nos va a costar ni de cuanto nos vamos a ahorrar. Para quedarnos igual, o peor, mejor es quedarnos con la Autoridad. No queremos otro fiasco como la telefónica y al carajo la Junta de Control Fiscal.