Por Carlos R. Alicea Negrón

En estos momentos de la caída de la colonia, de su fracaso, de su quiebra, cobra importancia todas aquellas acciones que van hacia el terminar con el colonialismo.
Este pasado sábado 15 de julio participamos en la Sexta marcha por la Independencia de Nuestra Nación. Creo firmemente, así como la organización en la que milito, que debo participar en toda actividad, que pueda contribuir en avanzar la independencia nacional de Puerto Rico.
Todo independentista debe tener como sur el apoyo solidario y militante, en correspondencia con sus capacidades y oportunidades, a organizaciones y acciones que postulen como meta fundamental la consecución de la independencia de nuestra nación.
Un grupo de compañeras y compañeros caminamos y pregonamos con energía y entusiasmo nuestra adherencia a la causa justa y noble de continuar contribuyendo a la lucha y el avance de la independencia de nuestra nación y el fin del régimen imperial.
Como soldados de la gesta libertaria de nuestro pueblo es fundamental que reflexionemos con amor y mesura sobre los caminos recorridos y las accione tomadas. Un principio vital para poder fortalecernos y crear nuevos espacios de acción-liberación es tener un compromiso real con la autocrítica, con analizar y evaluar que se hizo excelentemente y que áreas se deben mejorar, cambiar, transformar para poder evolucionar y crecer como parte de nuestras contribuciones al Movimiento de Liberación Nacional.
Como toda empresa humana, no todo puede salir perfecto y es entonces por el principio de siempre apegarnos a la verdad y desde la humildad crear los espacios que nos permitan celebrar lo que haya que celebrar y rectificar lo que haya que rectificar.
Hay que diversificar y pensar en derroteros que rompan lo que se convierte en rutina y en actividades esperadas, predecibles. Hay que innovar y crear espacios que nos reten a salirnos de nuestras cotidianidades normalizadas.
La Marcha por la Independencia es una acción que requiere una integración e inclusión de todos los componentes del Movimiento de Liberación Nacional, y de trabajarlo militantemente desde un espacio de la solidaridad, la humildad y la esperanza de que hemos sido y somos capaces de crear instancias de colaboración y trabajo colectivo que se sobreponen a las falibilidades que tenemos nosotros los seres humanos y las organizaciones.
Que viva Puerto Rico Libre. Hasta La victoria.
Movimiento Ñin Negrón – boletín junio 2019
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