Por:  Prof. Martha Quiñones Domínguez

Según los CPA esta reforma son enmiendas al Código Contributivo, alteran los objetivos que debe tener un Sistema Contributivo. Toca varios tópicos, pero se concentra en 5 renglones y una añadida, estos son:

Crédito por Trabajo
Reducción del B2B hasta eliminarlo.
Reducción tasas contributivas a las corporaciones
Reducción tasas contributivas a individuos
Reducción del IVU a los restaurantes
Las tragamonedas, pago de licencias y cobro de impuestos por los
premios de $500 o más.

Cuando se hacen cambios a las contribuciones hay que asegurar que cumpla con unos criterios y principios: Suficiencia, Equidad, Neutralidad y Simplicidad. Ninguna de estos principios se cumplen, no se recauda lo suficiente para solventar el gasto del Estado (que es su función principal para lograr equidad), no es para tod@s, no es simple el proceso y genera distorsiones en la asignación de recursos para las actividades económicas de la población.

Comencemos con el Crédito por Trabajo (Earned Income Credit) que benéfica al 80% de los contribuyentes, “se concederá un crédito contra la contribución sobre ingresos a aquellos individuos residentes de Puerto Rico, durante todo el año, que generen ingreso bruto ganado” que se ajusta según el tipo de familia e ingresos y llega hasta el ingreso de $40,000. Son cambios populistas que pretende que los que ganan menos crean que gobiernan para ellos, cuando en realidad es para beneficiar y restarle contribuciones a los que más ganan. Es
importante señalar que sí, se hace justicia contributiva, aunque contributivamente estas personas están exentas por sus bajos salarios (50% con menos de $19,606 al año) y sólo añade darle un crédito que funciona como un subsidio para compensar que están trabajando y aportando al país. Es un ingreso adicional que se usa en el consumo.

No representa equidad contributiva, cuando el que tiene más paga menos, llevando la carga a los que están en el medio, como veremos con las otras enmiendas y mucho menos hace justicia a las mujeres trabajadoras (no hay equidad de género).

El B2B es un impuesto para los comerciantes (bienes y servicios), señalan que “por su naturaleza, aumenta el costo de hacer negocios y distorsiona la efectividad de una economía productiva…” La propuesta lo elimina a los negocios que cobran el 4% y los que cobran por encima de eso por su tipo de servicio se baja a 4% para gradualmente eliminarlo. Esto no compromete que se va a llevar ese ahorro a los consumidores o a  generar inversión en negocios para estimular la economía.

Sobre la Reducción de tasas contributivas a las corporaciones y a las tasas contributivas a individuos, las mismas tienden a beneficiar a los que ganan más. Las deducciones aplican a los que ganan más de $75,000 (7% de la población). No hay equidad para l@s trabajadores
asalariados que se encuentra entre $30,000 a $75,000 (25.7% de los que radican planillas) no tienen beneficios con estas reducciones, tampoco hay ajustes por cuestiones de género.

La Reducción del IVU a una tasa especial intermedia de un 7% la cual será aplicable a los “restaurantes y establecimientos dedicados a la venta de alimentos preparados.”   Pero añaden “la imposición y el cobro de esta tasa especial será tratada como una especie de
privilegio para aquellos comerciantes que cumplan con ciertos parámetros establecidos por el Secretario.”  Juzgue qué significa eso y a quiénes de los consumidores beneficiará.

Para lograr neutralidad y lograr recaudos se añade, pagar un impuesto anual por concepto de derechos de licencia a cualquier persona que opere por cada máquinas o artefactos de pasatiempo manipulados con monedas, tarjetas, fichas o artefactos similares (e tipo mecánico, electrónico, o de video para niños y jóvenes), vellonera, por cada mesa de billar, y se “impondrá, cobrará y pagará en lugar de cualesquiera otras contribuciones impuestas por ley una contribución sobre los premios obtenidos en las máquinas de juegos de azar” mayores de $500. Los mismos se asignan, 45% que se destinará como aportación a
los Planes de Retiro de la Policía de Puerto Rico y liquidación de licencias y su retiro, 45% se destinará para cubrir la aportación de los municipios a la Administración de Seguros de Salud de Puerto Rico, y 10% de dicho ingreso ingresará al Fondo General del Gobierno de
Puerto Rico.”  O sea que llena el pote del Fondo General con sólo un 10%. Pero porqué no se aplica igual justicia contributiva a l@s maestros, de las cuales la mayoría son mujeres.

La Junta de Control Fiscal (JCF) alega que esa Reforma es “inconsistente” y que no es neutral con respecto a los recaudos para cumplir con el Plan Fiscal del Gobierno.  Pide dos elementos adicionales:
Que se aumente el recaudos en $20,000 millones de contingencia en caso de que algunos medios contributivos no provean ingresos necesarios. Que se impongan restricción al Departamento de Hacienda de Puerto Rico de acordar beneficios contributivos. Añaden que no existen estudios que explican cuántos serán los recaudos de las tragamonedas y que no se puede arriesgar los recaudos actuales, alegando que falta neutralidad sobre los ingresos y que no “canibalicen” otras fuentes de ingresos presentes en el Plan Fiscal.  Es curioso que exijan estudios cuando la JCF y sus asesores se han distinguido por la falta de estudios para justificar sus acciones, sólo le preocupa el dinero. Los controles a Hacienda lo justifican con
el argumento de que en  hay que tener control pues en los últimos 7 meses han aprobado créditos contributivos por más de $521 millones en tratos preferenciales a ciertas empresas.

No se incluyó la eliminación del impuesto al inventario que varia por municipio (entre 7% al 11%) y va al CRIM. Según los contables no es tan devastador para los comerciantes y los municipios. Además, los comerciantes no tendrán más inventario pues no hay capacidad para guardar, no se pedirá más inventario porque depende de la capacidad de venta de cada negocio y los tiempos picos y que sólo beneficia a cierto comercio grande que acapara el mercado.

Al fin la llamada reforma beneficia a los que tienen más dinero que pagarán menos, no existe equidad ni justicia contributiva a l@s que trabajan y construyen la economía y no gozan de esos beneficios. Las mujeres trabajadoras jefas de familias son las más perjudicadas.

Luchamos para vencer, por Puerto Rico

Por: Martha Quiñones Domínguez, Ph.D.
Universidad de Puerto Rico
Presidenta de la Mujeres Economistas
Pasada Presidenta de la Asociación de Economistas y de la Sociedad
Puertorriqueña de Planificación
Cultura, Sociedad, Ambiente y Economía

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