Por: José Nicolás Medina Fuentes

«Todos los acuerdos con acreedores son nulos para la nacionalidad puertorriqueña.”

La deuda pública es injusta, ilegal y por tanto odiosa e impagable por la nación puertorriqueña objeto del más vil, delictivo y fraudulento coloniaje. Esa deuda es responsabilidad única y exclusiva del único soberano, el gobierno Imperial norteamericano, quien tiene todos los poderes de la soberanía conculcados a nuestra nación por la fuerza de las armas, imposición de su estado de derecho y hegemonía ideológica mediante su sistema oprobioso del coloniaje.

Que sepan lo acreedores que esos acuerdos leoninos acordados entre la Junta de Control imperial impuesta, el alter ego marioneta federal territorial inexistente del ELA, los acreedores y la jueza designada por el imperio no tienen ni una pizca de legitimidad para la nacionalidad boricua compuesta por 8.5 millones de almas. No hay otra ruta, le corresponde al gobierno de Estados Unidos asumir esa deuda, expropiarle y pagarle a los acreedores y fondos buitres. Jamás van a tener un pueblo sumiso pagando esa deuda odiosa por una eternidad con tributos, tarifas, matrículas, eliminación de derechos adquiridos y humanos. Habrá rebeldía eterna frente a la deuda odiosa. La deuda nunca será nuestra, los acuerdos son nulos, no los hemos consentido, son producto del fraude y el colonialismo. Patria sobre buitres, acreedores y coloniaje. La deuda es del imperio.»

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